La Orden Literaria Francisco de Quevedo está en plena actividad. El pasado 8 de julio tuvo lugar un acto en honor de Santo Tomás de Villanueva y días después se emitió el fallo en el jurado de la XXXVIII edición de los premios de poesía Francisco de Quevedo.
Este año se recibieron casi 400 trabajos y los elegidos fueron:
Premio D. Francisco de Quevedo, «Contemplando su firma» de Susana Palma Ruíz, de Hospitalet de Llobregat (Barcelona).
Premio Tema Libre (dedicado al poeta Rafael Simarro), «De azul y terracota», de Patrocinio Gil Sánchez, natural de Llodio (Álava).
Premio El Buscón, para menores de 30 años, «Huida» de Vicente Tena, de Guadalajara.
Los poetas premiados leerán sus trabajos y serán investidos caballeros o damas de la Orden Literaria, el 26 de agosto, en el claustro del Convento de Santo Domingo de Villanueva de los Infantes, donde se conserva la celda en la que murió Quevedo. Yo, como dama de la Orden, también estaré allí. Os espero.